Seis elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) perdieron la vida y dos más resultaron gravemente heridos tras la detonación de un artefacto explosivo improvisado en el municipio de Santa María del Oro, Jalisco. El incidente ocurrió cuando un convoy militar, acompañado por elementos de la Guardia Nacional, realizaba un operativo en un camino de terracería entre las comunidades de Las Pilas y La Mesa, una zona serrana disputada por el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) y otras células criminales.
Según reportes preliminares, el estallido se produjo al activarse una mina terrestre oculta en el camino, causando la muerte inmediata de seis soldados, entre ellos el segundo subinspector Jovany Rosales Rosales y el subagente Jorge Alberto Cruz Velázquez. Los dos militares heridos fueron evacuados en helicóptero a un hospital, donde se reportan en estado grave, según fuentes del Ejército citadas por Milenio.
Santa María del Oro, ubicado en los límites con los municipios michoacanos de Tepalcatepec, Los Reyes y Cotija, es un punto estratégico en la disputa territorial entre el CJNG y grupos rivales como Cárteles Unidos. La región, conocida como Tierra Caliente, ha sido escenario de múltiples ataques contra fuerzas de seguridad, incluyendo el uso de minas terrestres y drones con explosivos, tácticas atribuidas al CJNG para obstaculizar operativos federales.
Este no es el primer incidente de este tipo en la zona. En febrero de 2024, un convoy del 17 Batallón de Infantería de la 21 Zona Militar, con sede en Morelia, fue emboscado con minas terrestres en la localidad de Zipoco, también en Santa María del Oro, dejando un saldo de un militar muerto y tres heridos. Desde entonces, las autoridades han intensificado los operativos para localizar y desactivar estos artefactos, con más de 30 minas detectadas en la región en los últimos meses.