El gobernador Salomón Jara compró, a espaldas de los concesionarios del transporte público, unidades de la marca Foton Motor, fabricadas en China y ya usadas en ciudades como Monterrey y la Ciudad de México, para convertirlas en BinniBus y deslumbrar a las y los oaxaqueños, reclamó el “pulpo camionero”.
Con una protesta en la Alameda de León, trabajadores y concesionarios desglosaron sus inconformidades al señalar que fueron engañados y traicionados por el gobernador. Uno de los acuerdos era la compra de unidades de marca Volvo con un valor superior a los cinco millones de pesos. Bajo ese entendido, se autorizó el incremento del pasaje de ocho a diez pesos en octubre de 2024.
Sin embargo, el gobernador no cumplió y se adelantó con la compra de unidades usadas de Foton Motor, con sede en Changping, Pekín, China. Según los concesionarios, estos autobuses ya han circulado en otras ciudades y han presentado fallas y explosiones.
“Fuimos varias veces a ver qué camiones se iban a comprar, porque era parte de los acuerdos y por el cual se incrementó el pasaje. ¿Y qué hizo el gobierno actual? Se adelantó y compró lo peor de lo peor”, expusieron.
Señalaron que, al desplazar al “pulpo camionero”, el gobierno del estado tendrá el control total del transporte público. Por lo tanto, aunque presuman una tarifa baja, con el tiempo aumentará sin que la ciudadanía pueda protestar.
Además, afirmaron que este proyecto, lejos de ser para el pueblo, generará ganancias para unos cuantos funcionarios.
“Hay muchas zonas donde hace falta transporte, ¿por qué no priorizaron esas zonas y vienen y entran donde ya hay rutas, a saturar más el tráfico?”, expusieron.
También recordaron la llegada de los camiones Sertexa, que arribaron con varias promesas bajo la anuencia del exgobernador José Murat Casab y hoy se encuentran en el olvido.
“El pueblo que no conoce su historia está condenado a repetirla, y es una lástima que los oaxaqueños no se den cuenta de lo que está pasando”, señalaron, al insistir en que las inconformidades de la ciudadanía se estaban discutiendo en mesas de trabajo, pero no fueron respetadas por este gobierno.
Mayra Acevedo, una de las portavoces del movimiento, expuso que este gobierno es “el más mentiroso y corrupto”, y que ha manipulado la información al ver que el BinniBus es un proyecto que deja grandes ganancias sin necesidad de transparentar.