Cansados de la creciente inseguridad y los constantes asaltos en las carreteras, transportistas de la Alianza Mexicana de Organización de Transportistas, A.C. (AMOTAC) y la Confederación Autónoma de Trabajadores y Empleados de México (CATEM) intensificaron sus protestas, con bloqueos en Puebla y Tlaxcala, pero que alcanzó la entidad oaxaqueña, al cerrar ambos carriles de la autopista Cuacnopalan-Oaxaca.
Las manifestaciones arreciaron tras el reciente asesinato de un operador el pasado viernes 26 de julio en el kilómetro 19 de la autopista Cuacnopalan-Oaxaca, a la altura del municipio de Cañada Morelos.
La víctima, quien conducía un tractocamión con dos semirremolques tipo pipa, fue interceptada por delincuentes que viajaban en una camioneta.
A pesar de las exigencias de los asaltantes para que se detuviera, el conductor continuó su marcha, lo que provocó que los agresores le dispararan, causándole la muerte.
“No podemos seguir trabajando con el temor de ser la próxima víctima. Nos están matando y robando, y las autoridades no hacen nada”, declararó el transportista Rafael Ortiz Pacheco.
Además de la Cuacnopalan-Oaxaca, los bloqueos también impactan la autopista Puebla-Atlixco o Atlixcáyotl, la México-Puebla a la altura de Los Cochinitos, y la Puebla-Córdoba con un cierre en Acatzingo.
Estas acciones han provocado un severo caos vial, que afecta a miles de automovilistas y al transporte de carga en general.
AMOTAC, que agrupa a propietarios y operadores de transporte de carga y pasajeros, ha reiterado sus demandas al gobierno federal y estatal, entre las que destaca mayor seguridad en carreteras, para frenar los asaltos y homicidios de choferes.
Además reclaman tarifas que reflejen los costos operativos y garanticen una competencia equitativa y dolicitan apoyo para modernizar sus unidades, lo que contribuiría a la seguridad y eficiencia del transporte.
Los transportistas han advertido que mantendrán los bloqueos hasta obtener respuestas de las autoridades, al señalar que la violencia acrecienta en el sur del país.