Desde el inicio de la gestión del autodenominado gobierno estatal de la “Primavera Oaxaqueña”, liderado por Salomón Jara, se ha impulsado un discurso político que establece que sus estrategias, decisiones y programas de gobierno, son para fortalecer la transformación en Oaxaca.
Durante su discurso en su toma de protesta, el mandatario oaxaqueño aseguraba que acabaría con el saqueo, así como que priorizaría sus acciones para implementar la austeridad, mejorar la transparencia, impulsar la paridad de género, y combatir el nepotismo.
Ya para la mitad de su segundo año de mandato, después de la visita del expresidente López Obrador a finales de junio del 2024, en su conferencia del 24 de junio, Jara afirmaba que, en Oaxaca, gracias a las acciones de su gobierno, se estaba consolidando la construcción del segundo piso de la cuarta transformación.
Pero si para usted, querido lector, las promesas vacías planteadas anteriormente no son suficiente burla para su buen criterio, recuerde que, en Oaxaca, el gobierno Morenista de Salomón Jara está haciendo lo que nunca se hizo, trabajando como nunca, para llevar bienestar a quienes más lo necesitan.
Y después de poco más de dos años de gobierno la transformación en Oaxaca ya es un hecho.
Ha transformado, al punto de la distorsión, el concepto de tequio, que pasó de ser un trabajo colectivo que toda persona debe a su comunidad sin recibir remuneración alguna, a convertirse en un sistema de neotiendas de raya. Es decir, que aquel godin que no se presente a los tequios del bienestar, pone en riesgo su continuidad laboral. Además, diversas fuentes consultadas dentro del gremio de burócratas sostienen que en estos tequios si existe remuneración, pero sólo para quienes facturan los materiales, herramientas e insumos utilizados.
De igual manera, Salomón ha permitido, que sus subalternos conviertan lo irracional en racional.
Como, por ejemplo, que la secretaria de turismo transformará 3 millones 285 mil pesos en líneas de papel y plástico picado, o que un concierto, cuyo artista cobra entre 3 y 4 millones, se facturará en 12 millones 760 mil pesos. Y a pesar de que el mandatario intentó desmentir ambos sucesos, lo cierto es que la realidad le explotó en la cara.
Por otro lado, el sistema de salud pública de Oaxaca también ha recibido su dosis de cambios.
Ya que la primavera oaxaqueña ha trasformado un sistema que estaba mal en algo peor, dejando entre dicho el humanismo que tanto pregonan. Porque mientras la población permanece en estado de indefensión, sin acceso a medicamentos, exámenes de laboratorio, ni consultas médicas en algunas regiones, el gobierno estatal prefiere invertir en conciertos gratuitos.
En este contexto, Salomón Jara, junto con otros mandatarios, han tomado el camino fácil, tirando la bolita a la presidenta, culpando al programa IMSS Bienestar del retraso en el abasto de las medicinas. Sin embargo, en el caso de Oaxaca, dicho programa se comenzó a implementar a partir del 21 de marzo del 2023, cuando la primavera oaxaqueña ya estaba en funciones.
Lo que resulta interesante tomando en cuenta que, desde esas fechas, además del desabasto de medicamentos, también existía la falta de equipos e insumos, así como la notoria falta de mantenimiento a la infraestructura de salud.
De acuerdo con datos del Centro de Investigación Económica y Presupuestaria, tan sólo en este año, Oaxaca se posicionó como la séptima entidad que recibe mayor gasto federalizado para salud per cápita. Por su parte, de acuerdo con datos de la plataforma de Transparencia Presupuestaria, en el 2025, Oaxaca recibió un monto total de 94mil millones de pesos, posicionándola en la novena posición con el mayor monto de gasto federalizado asignado. Siendo una tendencia de ingresos que se ha mantenido durante los últimos cinco años pero que, desafortunadamente para los oaxaqueños, son cantidades que no logran cubrir todas las necesidades del sector salud.
Por otra parte, el gobierno federal tampoco está exento de que sus programas se transformen en una estrategia de la primavera oaxaqueña. El caso más evidente es el programa federal “Bachetón”, que contempla una inversión de 4 mil millones de pesos destinados a la conservación de caminos en los 32 estados del país. Pero que, de acuerdo con fuentes internas en el gobierno del estado, se transformó en el “Plan de Acción para la Zona Metropolitana”, que contempla trabajos de bacheo y reencarpetamiento solo para tres municipios, Oaxaca de Juárez, Santa Cruz Xoxocotlán y Santa Lucía del Camino.
Que, de acuerdo con la página de comunicados de prensa del gobierno del estado del 10 de enero del presente año, cuenta con una inversión de 135 millones de pesos, tanto del gobierno del estado como de los municipios.
Sin embargo, si en dado caso este programa no es el mismo que el del gobierno federal, ¿en qué se ha invertido el dinero entonces que le corresponde a Oaxaca del programa federal?
Por su parte, el magisterio oaxaqueño, conocido por ser, desde su origen, un movimiento democrático, combativo y opositor natural del Estado, motivados por el ambiente de cambios, también ha transformado su mecanismo de sanciones. Ya que ahora ya no aplican sus principios rectores, ahora implementan la inhabilitación, procedimiento característico del aparato estatal de gobierno.
De acuerdo con fuentes internas, este nuevo método de sanción ha generado inquietud dentro del gremio magisterial, ya que esto viene a reforzar la hipótesis que se tiene sobre la secretaria general de la sección 22, Yenny Aracely Pérez Martínez y su relación servil con el gobierno estatal de Salomón Jara.
Y aunque la secretaría general ha intentado justificar sus decisiones argumentando en diversas ocasiones que está combatiendo la corrupción de forma interna ante los manejos turbulentos en la asignación de horas clase y las irregularidades en los procedimientos de la concesión de plazas, lo cierto es que, ante la evidencia, su lucha anticorrupción no es aplicable para todos los niveles del magisterio.
Recientemente, la Asamblea Estatal de la sección 22 determinó inhabilitar al titular de la Secretaría de Jubilados y Pensionados del Comité Ejecutivo, Armando F.G., por presuntos actos de corrupción. Además, de acuerdo con el acta de acuerdos, tareas y pronunciamientos, también se convino la integración de una Comisión de Honor y Justicia para investigar las denuncias de irregularidades presentadas en contra del ahora exdirigente.
Es decir, primero lo inhabilitan, sin otorgarle el derecho a su defensa y atentando en contra de sus derechos laborales, para luego ser investigado. Siendo un método que ha sido utilizado recurrentemente por el actual Comité Ejecutivo Seccional (CES).
Como, por ejemplo, en contra de 185 trabajadores que conformaron el CES 2017-2022 y organismos auxiliares, señalados, supuestamente, por haber incurrido en actos de corrupción. Aplicando la misma dosis para el ex titular de la Secretaría de Trabajo y Conflictos del nivel de Secundarias Técnicas, Elmer Noé, y del auxiliar de la Secretaria de Trabajos y Conflictos del nivel Media Superior y Superior, José Luis Manzano, también por supuestos actos de corrupción y venta de plazas.
No obstante, estas de “limpieza interna”, que además de violar los derechos sindicales, genera controversia al ser un combate a la corrupción inequitativo.
Por ejemplo, y de acuerdo con fuentes de la escuela secundaria General “Heliodoro Charis Castro” ubicada en Juchitán de Zaragoza, pocos meses después de la llegada de la primavera oaxaqueña al gobierno estatal, han llegado poco más de 10 personas a esta institución con una plaza.
Quienes además de no tener perfil idóneo, les fue otorgada sin el debido procedimiento, violando incluso el sistema de escalafón de la sección 22. Además, las mismas fuentes consultadas señalan que la mayoría de los beneficiados con dichas plazas cuentan con una similitud entre apellidos, pero también de línea familiar, con el actual director del IEEPO, Emilio Montero, originario de Juchitán, ¿casualidad?
De esta situación, diversos integrantes del CES actual tienen amplio conocimiento, por lo cual las fuentes se preguntan, ¿por qué no se ha inhabilitado también al titular del nivel de secundarias generales? ¿El combate a la corrupción interna es sólo contra aquellos que no están alineados con las decisiones del actual CES?
Otro ejemplo de este controversial método de sanción magisterial, que más parece una cacería de brujas, es en el nivel de homologados, donde a decir de información proporcionada por fuentes de estos niveles, y en base a sus argumentos, existen irregularidades en los procesos de mejoramiento de plazas y la contratación de nuevo personal.
Ante estos ejemplos, que son clara evidencia que permiten deducir la actuación progobierno de Yenny Pérez, diversas fuentes del gremio magisterial se preguntan, ¿en esta jornada de lucha, por qué no hay plan de acción en contra de Salomón Jara en territorio Oaxaqueño cuando fue por él que no se aprobó la Reforma Educativa en el 2019?
Y aunque entre la misma base magisterial se dice que intentarán protegerla, lo cierto es que no borra lo evidente, tarde o temprano, la realidad de los hechos otorgará los escenarios para fortalecer o rechazar la hipótesis de que existe un claro servilismo del actual CES con el gobierno del estado. No se puede engañar siempre de todo a todos, y tanto Yenny, como quienes intentan controlar a la sección 22, olvidan que pueden convencer a todos los integrantes del CES actual, pero es un movimiento de bases, no de lideres.
Finalmente, la transformación de Oaxaca impulsada por el desgobierno Morenista de Salomón Jara, es el ejemplo claro del gatopardismo como modelo de gobierno, ya que, desde su primer discurso oficial, y hasta el día de hoy, cambiaron todo para que nada cambiara.