El estallido ocurrió poco antes de las 12:00 horas cuando una camioneta detonó explosivos frente a las instalaciones de la Policía Comunitaria, dejando el vehículo completamente siniestrado y restos humanos de al menos dos personas en el lugar, según el comunicado oficial de la FGE.
Ocho integrantes de la Policía Comunitaria resultaron lesionados inicialmente y fueron trasladados a nosocomios cercanos, donde tres de ellos fallecieron durante la atención médica, elevando el saldo a cinco víctimas mortales y cinco heridos que permanecen en observación.
Personal de la FGE, en coordinación con Sedena, Semar, SSPC y SSP, acordonó la zona y desplegó un equipo especializado en investigación post-blast, colaborando con el Agrupamiento Especializado en Artefactos Explosivos de la SSP y la Fiscalía General de la República para esclarecer si se trató de un atentado deliberado.
Autoridades federales reforzaron la seguridad en el municipio de la Sierra-Costa, una zona de alta tensión por disputas entre grupos delictivos y autodefensas, mientras la FGE reiteró su compromiso con el Gabinete de Seguridad para avanzar en la carpeta de investigación.











