El conflicto territorial y ambiental entre los municipios de Tlalixtac de Cabrera y San Andrés Huayápam se ha reactivado con un nuevo bloqueo carretero, por segundo día consecutivo, y tras un acuerdo de asamblea, habitantes de Tlalixtac mantienen cerrado el acceso a Huayápam, denunciando el incumplimiento del Gobierno del Estado para reubicar un relleno sanitario que contamina su territorio.
El cierre de la carretera, realizado anoche con montones de tierra, responde a la frustración de la comunidad de Tlalixtac. Según la regidora de Salud y Ecología, Alejandrina López Luis, la protesta se deriva del incumplimiento de las autoridades que se habían comprometido a reubicar el sitio de disposición final de desechos de San Andrés Huayápam, ubicado en los límites con Tlalixtac.
El malestar de los pobladores de Tlalixtac se intensificó al sentir que fueron “burlados” por sus vecinos. San Andrés Huayápam había asegurado previamente que dejaría de utilizar el sitio como depósito final de basura; sin embargo, los habitantes de Tlalixtac confirman que la actividad continúa.
La Regidora López Luis enfatizó que la permanencia de este tiradero a cielo abierto representa una grave afectación al ecosistema de un área natural protegida colindante, contaminando suelos y fuentes de agua. Ante la falta de acciones concretas para la reubicación, la asamblea comunitaria de Tlalixtac decidió anoche, miércoles, proceder al cierre de la vía.
El bloqueo ha generado tensión entre ambos municipios colindantes, siendo la segunda vez en el año que estalla este conflicto por el manejo de los residuos sólidos. La protesta continuará hasta que las autoridades estatales y municipales presenten una solución definitiva al problema ambiental y territorial, garantizando el retiro inmediato del relleno sanitario de la zona limítrofe.










