La revocación de mandato es un proceso “engañoso” diseñado para favorecer a las autoridades en turno, afirmó Alejandro Cruz Pimentel, integrante del Comité Popular por la Revocación de Mandato de Salomón Jara Cruz. La organización trabaja para coadyuvar en la recolección de firmas ciudadanas con el fin de que las autoridades electorales emitan la convocatoria correspondiente.
El activista señaló que la reforma “fast track” aprobada recientemente acortó de 90 a 30 días el periodo para recabar apoyos, modificando “tajantemente” un escenario que ya se venía madurando. Consideró que este cambio es uno de los principales obstáculos que deberán sortear ciudadanía y promoventes.
“Los plazos son más cortos… por eso mencionaba que es un procedimiento engañoso, pero el reto es demostrar que efectivamente lo es”, dijo en entrevista difundida por la organización Servicios para una Educación Alternativa (Educa).
Cruz Pimentel advirtió que con el umbral de 40% de participación para que el resultado sea vinculante “no se pueden esperar cifras tan altas”, por lo que previó que el proceso podría quedar “fracturado” al haberse impulsado con rapidez legislativa.
Recordó que desde el 1 de noviembre corren 30 días para reunir 318 mil firmas en 280 municipios, objetivo que calificó de “difícil”, aunque subrayó que continúan los esfuerzos para alcanzarlo. “Al final, vamos a tener que impulsar ante el Congreso local una reforma a esta ley de revocación de mandato, hecha a modo”, añadió.










