La tarde de este sábado 1 de noviembre de 2025, alrededor de las 15:00 horas, una explosión de magnitud en la sucursal de Waldo’s ubicada en las calles Doctor Noriega y Matamoros, en el corazón del centro de Hermosillo, desató un voraz incendio que se propagó rápidamente, atrapando a decenas de personas en el interior de la tienda comercial. El saldo preliminar, según reportes actualizados de autoridades locales y medios, asciende a 23 personas fallecidas —entre ellas al menos siete menores de edad— y más de 20 heridos graves, algunos en estado crítico, quienes fueron trasladados de urgencia a hospitales como el Instituto Mexicano del Seguro Social y clínicas privadas.
Elementos de Bomberos de Hermosillo, Cruz Roja, Protección Civil estatal y federal combatieron las llamas durante horas, logrando controlarlo hacia las 17:00 horas, aunque las labores de rescate y búsqueda de posibles víctimas continúan bajo un amplio perímetro de seguridad establecido en la zona. El Gobierno de Sonora, encabezado por el gobernador Alfonso Durazo, descartó “por completo” que el incidente sea un atentado o acto de violencia contra civiles, apuntando a una posible explosión de un transformador eléctrico o fuga de gas como causa inicial, y solicitó a la ciudadanía no acercarse para no entorpecer las maniobras de emergencia.
En un gesto de solidaridad inmediata, las autoridades municipales y estatales suspendieron todas las actividades programadas por el Día de Muertos en Hermosillo, incluyendo ofrendas y eventos culturales, para priorizar la atención a las familias afectadas. El alcalde Antonio Astiazarán y el gobernador Durazo expresaron sus condolencias públicas y anunciaron atención integral, que incluye apoyo psicológico, económico y legal para los deudos, así como una investigación exhaustiva por parte de la Fiscalía General de Justicia del Estado para confirmar las causas exactas y deslindar responsabilidades.
La tragedia ha conmocionado a la comunidad hermosillense, transformando un día festivo en luto colectivo; videos y testimonios en redes sociales muestran el caos inicial con vidrios destrozados, humo denso y gritos de auxilio, mientras vecinos ofrecieron refugio temporal. Las autoridades mantienen actualizaciones constantes y piden reportar cualquier información relevante para agilizar la respuesta humanitaria.










