Una mujer de 68 años, identificada como Rosa María Cárdenas Gabriel —dueña del comedor Rosy—, perdió la vida el 30 de octubre en el Hospital Regional del ISSSTE de la ciudad de Oaxaca, tras siete días de hospitalización por quemaduras sufridas cuando un grupo armado le prendió fuego a su vivienda el 24 de octubre en San Pedro Pochutla.
De acuerdo con el Centro de Derechos Humanos y Asesoría a Pueblos Indígenas (Cedhapi), el ataque ocurrió durante la madrugada del 24 de octubre, cuando aproximadamente cuatro hombres armados a bordo de motocicletas incendiaron la casa de la víctima. A un costado del domicilio se ubica el establecimiento “Comedor Rosy”, en el crucero de la carretera Puerto Escondido–Pochutla.
El Cedhapi señaló que, pese a que algunas personas intentaron auxiliarla al percatarse del incendio, sujetos armados habrían impedido que se le brindara ayuda. La organización detalló que Rosa María fue sepultada el 1 de noviembre en el panteón del Zapote.
La agrupación afirmó que existía una intención de despojarla del terreno donde se encuentra su vivienda y el comedor, del cual habría sido propietaria por cuatro décadas. También denunció que en la región de la Costa de Oaxaca se han registrado diversos asesinatos perpetrados por individuos a bordo de motocicletas que permanecen impunes.
Por ello, el Cedhapi solicitó a la Fiscalía General del Estado de Oaxaca investigar los hechos y a la Defensoría de los Derechos Humanos del Pueblo de Oaxaca emitir medidas cautelares para proteger a la familia de la víctima.










