Un grupo de ciudadanos afectados por un presunto fraude de una concesionaria Chevrolet protestó este martes frente al Palacio de Gobierno para exigir la intervención de las autoridades y la agilización de las investigaciones.
A tres meses de haber presentado las denuncias formales, los inconformes denuncian que las carpetas de investigación no han tenido avances significativos, lo que prolonga la incertidumbre de decenas de familias que entregaron sus ahorros o vehículos usados con la promesa de recibir unidades nuevas que jamás les fueron entregadas.
Según los afectados, han recibido diversas promesas de solución por parte de la empresa, pero hasta la fecha, no han logrado recuperar ni el dinero que invirtieron ni los automóviles que dieron a cuenta como parte de los convenios de compra.
“Entregamos nuestros ahorros, confiamos en una marca reconocida, y ahora estamos sin nuestro dinero y sin el coche que nos prometieron,” señaló uno de los manifestantes.
El grupo hizo un llamado directo a las autoridades para que actúen de inmediato, agilicen los procesos y se sancione a los responsables de este esquema.
Advirtieron que la falta de acción afecta directamente el patrimonio de particulares que confiaron en la concesionaria.
La protesta busca presionar para que las investigaciones avancen y se dé una solución definitiva a la situación que los mantiene en un limbo legal y económico.