Esta mañana del lunes, se confirmó el fallecimiento de Miguel Uribe Turbay, senador y aspirante a la presidencia de Colombia por el partido Centro Democrático, tras más de dos meses de lucha hospitalaria.
Uribe, de 39 años, fue víctima de un atentado el 7 de junio en un parque de western Bogotá durante un mitin de campaña, donde recibió dos disparos en la cabeza y uno en la pierna. Tras ser sometido a múltiples cirugías en la Fundación Santa Fe de Bogotá, su estado permaneció crítico, con un deterioro reciente por un hemorragia en el sistema nervioso central reportada el fin de semana. Su esposa, María Claudia Tarazona, anunció su muerte en redes sociales con un emotivo mensaje, agradeciendo su legado como padre y esposo.
El ataque, que involucró a un menor de 15 años detenido en el lugar y otros sospechosos arrestados posteriormente, levantó alarmas sobre la violencia política en Colombia, evocando los asesinatos de candidatos en los años 80 y 90 por carteles y paramilitares. Uribe, conocido por su oposición al presidente Gustavo Petro y su rápida ascenso en el Centro Democrático, había liderado la lista senatorial en 2022 con el lema ‘Colombia Primero’. Su familia, con un historial trágico que incluye el asesinato de su madre, Diana Turbay, por el Cártel de Medellín en 1991, ahora enfrenta otra pérdida que ha conmocionado al país. El expresidente Álvaro Uribe, sin relación familiar, lo despidió como ‘una esperanza para la patria’.
Las autoridades colombianas han intensificado las investigaciones, apuntando a una ‘organización estructurada’ detrás del atentado, posiblemente vinculada a su postura contra el narcotráfico. No se han reportado avances significativos sobre el ‘cerebro’ del ataque, pero el caso sigue abierto.