La audiencia de Genaro García Luna, en Estados Unidos, prevista para el próximo miércoles, fue pospuesta de nueva cuenta para el 25 de agosto, moción fue aceptada por Brian Cogan, el juez que lleva el caso.
La fiscalía y defensa en el caso contra Genaro García Luna siguen poniendo de pretexto la pandemia de covid-19 para retrasar el avance del proceso, a pesar de que las autoridades encabezadas por el gobernador de Nueva York, Andrew Cuomo, han decretado el fin de las restricciones y han llamado a una apertura total de las actividades.
Por motivos similares, se pospuso la audiencia programada para el miércoles pasado, donde se presentaría el ex comandante de la policía federal mexicana, Iván Reyes Arzate, el cuál está cerca de entablar un acuerdo de culpabilidad que ya estudia su defensa, según se informó en abril.
Ambos casos se encuentran relacionados porque la fiscalía está interesada en que Reyes Arzate ofrezca información para el caso de García Luna. Por esta razón, no sólo ambos se hallan recluidos en el Centro de Detección Metropolitana al oeste de Brooklyn, sino que fiscales como Michael Robotti y el juez Brian Cogan se hallan asignados a los dos procesos.
En el memorándum enviado al juez, el nuevo fiscal titular de la Corte Federal del distrito este de Nueva York, Mark Lesko, insisten en una “producción de descubrimiento adicional el 18 de mayo de 2021, por un total de más de 31 mil páginas de documentos nuevos”.
Lesko adelantó que esperan “respuestas de citaciones pendientes” así como documentación de las solicitudes que ha presentado el gobierno para tener acceso a “pruebas extranjeras”, como se informó igualmente en los memorándums entregados en esta corte en febrero y abril.
Desde la videoconferencia celebrada en octubre de 2020, en la que Cogan le leyó la acusación de reemplazo, que ya incluía como coconspiradores a los subordinados de García Luna en la Secretaría de Seguridad Pública, Ramón Pequeño García y Luis Cárdenas Palomino, las audiencias de adelanto en este caso de alto interés mediático y político se han pospuesto primero en diciembre, después en febrero, más adelante en abril y ahora esta semana.
El ex director de la Agencia Federal de Investigaciones (AFI) durante el gobierno de Vicente Fox y Secretario de Seguridad Pública en el de Felipe Calderón ya cumplió un año y medio desde que fue detenido en Texas en diciembre del 2019.
Se ha declarado “no culpable” de los cargos en su expediente, de dirigir una “empresa criminal continua” conspiración internacional para distribuir cocaína, conspiración para poseer cocaína con intención de distribuir y conspiración para importar cocaína.
Fuente: Milenio
