Los intensos rayos del sol no dieron tregua. La desorganización era evidente. Debajo de los árboles y sombras improvisadas los adultos mayores aguardaron su turno para ser vacunados contra la COVID-19, en los municipios de Tlalixtac de Cabrera y San Bartolo Coyotepec.
En medio de largas filas, sin el respeto a la sana distancia y otros protocolos para evitar aglomeraciones, los “siervos” de la nación, apenas podían con un megáfono con el cual pretendían generar orden.
Marcados por las inclemencias del tiempo, las mujeres y hombres denotaban en sus rostros cansancio y desesperación.
La aplicación de las vacunas Astra-Zeneca, fue lento y cansado para los beneficiados, quienes a pesar de que se registraron en la plataforma federal para acceder a la inmunización, no fueron atendidos de manera inmediata.
Los “siervos” de la nación evitaron dar mayores informes sobre el número de vacunas y personas vacunadas.