El espíritu festivo de este 2025 se enfrenta a un panorama económico complejo para las familias mexicanas. Según las proyecciones de la Alianza Nacional de Pequeños Comerciantes (ANPEC), el costo de la tradicional cena navideña ha experimentado un incremento del 17% en comparación con el año anterior.
Organizar un banquete para un grupo de aproximadamente 15 personas requerirá ahora una inversión estimada de 17 mil pesos, lo que obliga a muchos hogares a replantear sus presupuestos para el cierre de año.
Los rubros más costosos
En Oaxaca, un estado con profunda riqueza culinaria, la presión inflacionaria se siente con fuerza en los mercados locales. El gasto se concentra principalmente en los siguientes elementos:
Platos fuertes: El pavo, la pierna o el bacalao alcanzan en conjunto un costo de 7 mil 150 pesos, representando el rubro más pesado para la economía doméstica.
Bebidas: Se proyecta un gasto de 4 mil 550 pesos para cubrir las necesidades de una reunión familiar de este tamaño.
Complementos: El presupuesto restante se divide entre guarniciones, ensaladas e insumos básicos de mesa.
A pesar de que en diversas regiones oaxaqueñas la tradición de compartir y la ayuda mutua —como la Guelaguetza o el tequio— suelen mitigar los costos individuales, el alza generalizada en los precios de los productos básicos representa un desafío significativo para mantener las tradiciones sin comprometer la estabilidad financiera de las familias al inicio de 2026.









