La FEMDO comenzó las diligencias en torno al atentado contra la Policía Comunitaria, con expertos en criminalística de campo, fotografía, medicina, genética, lofoscopia, telecomunicaciones, tránsito, ingeniería, arquitectura, incendios, explosivos, química y balística forense procesando la escena del estallido ocurrido el 6 de diciembre.
Tras el reporte inicial de la FGE de Michoacán, la FGR asumió la competencia por el presunto vínculo con organizada, confirmando el saldo de cinco víctimas mortales —incluyendo restos de dos en el sitio y tres fallecidos en hospitales— y 12 heridos graves, la mayoría integrantes de la autodefensa local.
Elementos de Sedena, Semar, SSPC y Guardia Nacional refuerzan la seguridad en la zona de Sierra-Costa, mientras el equipo de la AIC realiza peritajes post-blast para determinar el tipo de explosivo utilizado en la camioneta siniestrada frente a la base operativa.
La coordinación interinstitucional busca esclarecer si el ataque fue un ajuste de cuentas entre grupos delictivos o un intento de desestabilizar las autodefensas, en un municipio con historial de violencia territorial.











