Pacientes y familiares de la Unidad de Medicina Familiar (UMF) No. 64 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), ubicada en Tuxtepec, denuncian la persistencia de graves irregularidades y la falta de respuesta de la dirección de la unidad.
Las quejas que datan de hace meses, señalan un deterioro progresivo en la calidad del servicio y un trato que califican de “inhumano e indigno”.
Los derechohabientes lamentan que, a pesar de las denuncias previamente difundidas, la dirección a cargo de Eulalia Alba Santiago Ortiz no ha implementado acciones concretas para solucionar los problemas estructurales y humanos que afectan a los usuarios diariamente.
Entre los problemas más críticos y de larga data que enfrentan los usuarios de la UMF No. 64, destacan un elevador Inservible que lleva meses fuera de servicio sin mantenimiento ni reparación, lo que afecta a adultos mayores, con discapacidad o movilidad reducida, ya que se ven obligadas a subir escaleras en condiciones de riesgo.
Se reporta una escasez de asientos y espacios dignos, afectando especialmente a los grupos vulnerables. La queja central de los ciudadanos se dirige al nivel de la dirección.
Los usuarios reportan que continúan acudiendo a la dirección de la UMF No. 64, pero son sistemáticamente desatendidos. La directora Eulalia Alba Santiago Ortiz presuntamente no atiende personalmente a los pacientes ni a sus familiares.
En su lugar, delega la responsabilidad a su secretario, quien “se limita a recibirlos sin ofrecer soluciones concretas o compromisos de seguimiento”.
Esta dinámica ha generado malestar, frustración y desconfianza, con la población derechohabiente percibiendo una total falta de sensibilidad y compromiso institucional.
Los usuarios afectados claman por acciones correctivas inmediatas que garanticen el respeto a la dignidad y derechos humanos de quienes acuden a la UMF No. 64 en busca de atención médica.