El estado de Oaxaca registra su segunda víctima menor de edad a causa de las intensas lluvias. Se trata de Iker Gaspar Ramírez, un niño de tres años, cuyo cuerpo sin vida fue localizado la mañana de este martes tras ser arrastrado por la corriente de un arroyo en Colotepec, en la Costa oaxaqueña.
El menor desapareció la noche del lunes en el arroyo Mata de Bule, también conocido como Los Ruices, a la altura de la localidad de Valdeflores.
La tragedia ocurrió cuando la camioneta de pasajeros en la que viajaba su familia de regreso a su comunidad intentó cruzar el afluente crecido, siendo la unidad arrastrada por la fuerte corriente.
Tras casi diez horas de intensa búsqueda, que se reanudó a las 6 de la mañana de este martes con personal de Protección Civil Estatal y ciudadanos de comunidades vecinas, el cuerpo de Iker fue localizado.
El Coordinador Estatal de Protección Civil de Oaxaca, Manuel Maza Sánchez, confirmó el hallazgo, detallando que el cuerpo del pequeño fue encontrado a unos 5 kilómetros aproximadamente del lugar del accidente, atorado entre ramas sobre la orilla del arroyo, en la Ranchería Carrasco, Colotepec, a la altura de Valdeflores 2a sección.
La camioneta siniestrada, dedicada al traslado de personas y fletes, quedó gravemente dañada.
Otros dos miembros de la familia que viajaban en la unidad lograron ser rescatados con vida.
Se trata de Ramón Gaspar Ramírez, de 31 años, quien sufrió trauma de tórax y una probable fractura de cadera, siendo trasladado al Hospital General de Puerto Escondido y Wilbert Gaspar Luna, de 11 años, ambos son originarios de la comunidad de Mata de Bule.
Esta pérdida se suma a la de otro menor, un niño de 10 años que murió sepultado en San Isidro Miramar, Loxicha, a causa de un derrumbe provocado por las lluvias recientes, elevando a dos las víctimas infantiles de la temporada de lluvias en Oaxaca.