Existe un marcado contraste entre la percepción de inseguridad y la incidencia delictiva real en la capital oaxaqueña, según expuso el fiscal Bernardo Rodríguez Alamilla, al realizar un balance de las incidencias delictivas en el municipio de Oaxaca de Juárez, donde realizan una labor coordinada con el edil Ray Chagoya.
Aunque la percepción ha colocado a Oaxaca en el lugar 72 a nivel nacional a principios de año, en términos de incidencia delictiva entre las capitales del país, la ciudad se ubica en el puesto 22.
Rodríguez Alamilla señaló que la sensación generalizada de que la ciudad es insegura no se alinea con los datos duros de la Encuesta Nacional de Seguridad Pública Urbana (ENSU), los cuales demuestran que el municipio se encuentra por debajo de la media nacional.
Para ejemplificar esta disparidad, el fiscal citó cifras del mes de julio, refiriendo que solo se registraron cuatro robos a transeúntes en todo el mes, lo que equivale a un promedio de uno por semana, sin embargo, estos fueron mediáticos que atizaron la idea de una ciudad insegura.
Pese a que la capital se mantiene por debajo de la media nacional, el fiscal reconoció que sí hubo un pequeño incremento en la incidencia delictiva al comparar julio de 2024 con julio de 2025. Sin embargo, enfatizó que el principal reto es revertir la percepción de inseguridad que no coincide con las estadísticas oficiales.
El fiscal aseguró que la Fiscalía General del Estado está trabajando en coordinación estrecha con el Municipio de Oaxaca de Juárez para abordar este fenómeno.
Por su parte, el presidente municipal Ray Chagoya reafirmó el compromiso de su administración, al referir que el municipio mantiene “puertas abiertas para operativos coordinados”.
Ray Chagoya reconoció que garantizar la seguridad de la capital es un reto para su gobierno y destacó la necesidad de la colaboración interinstitucional para enfrentarlo.
Ambos funcionarios señalaron que seguirán trabajando en conjunto en operativos y estrategias de comunicación para alinear la percepción ciudadana con las cifras reales de seguridad.