La familia de Claudia Uruchurtu Cruz, desaparecida desde 2021, denunció una “nueva puñalada a la verdad y a la justicia” tras la resolución judicial que ordenó la libertad de Jhoan Ricardo Matus Marcial, quien fuera Consejero Jurídico del Gobierno Municipal de Asunción Nochixtlán.
La decisión fue emitida el pasado 21 de agosto de 2025 por la Segunda Sala Penal Colegiada del Tribunal Superior de Justicia del Estado de Oaxaca. La resolución que dejó en libertad a Matus Marcial se da en acatamiento a una sentencia del Primer Tribunal Colegiado en Materia Penal y de Trabajo del Décimo Tercer Circuito, con sede en San Bartolo Coyotepec, Oaxaca.
Este tribunal federal consideró que no había pruebas suficientes para determinar la responsabilidad del exfuncionario en la desaparición forzada de Claudia Uruchurtu.
Para la familia y los activistas que han seguido el caso por más de cuatro años, esta determinación judicial “echa por tierra” uno de los primeros casos en los que se habían logrado sentencias condenatorias contra servidores públicos por este delito.
Acusan que la medida fortalece la impunidad y la protección a quienes se encuentran en el poder, cobijados por el partido de Morena.
“Nos preguntamos ¿dónde está la independencia del Poder Judicial?, ¿dónde está la protección de las víctimas por parte de la Fiscalía del Estado?”, cuestionó Elizabeth y Sara Georgina Uruchurtu Cruz, hermanas de la víctima.
Denuncian que la justicia en este caso se ha enfrentado al “poder fáctico del Estado”, el cual, aseguran, controla y manipula los poderes de justicia a su antojo.
Los hermanas Uruchurtu señalan que la decisión de liberar a una persona acusada de desaparición forzada demuestra la grave irresponsabilidad de jueces y magistrados. Subrayaron que en crímenes tan atroces como este, el estándar probatorio debe ser diferente, y que la ignorancia o negligencia en su aplicación solo “perpetúa la impunidad y revictimiza a quienes más la necesitan”.
A unos días de la conmemoración del Día Internacional de las Víctimas de Desaparición Forzada, que se celebra cada 30 de agosto, la familia reiteró que, a pesar de que “la impunidad institucional se levante como un gigante que intenta aplastar nuestra búsqueda”, no van a descansar hasta encontrar a Claudia.