La importancia de los manglares en las zonas costeras de Oaxaca ha quedado dramáticamente demostrada una vez más, luego de que estos ecosistemas sirvieran de refugio vital para dos pescadores y un menor de edad que se extraviaron durante el embate del huracán Erick.
Los hombres, quienes habían sido reportados como desaparecidos, lograron salvar sus vidas al resguardarse entre la densa vegetación de manglar mientras la tormenta, de categoría 3, azotaba la región durante la noche.
Toño Olmedo y Enoc Carrillo, originarios de Zapotalito, en la Villa de Tututepec, fueron rescatados este jueves a las 10:40 de la mañana, luego de pasar horas de incertidumbre y angustia.
Ambos, junto a un menor de edad cuya identidad no ha sido revelada, habían zarpado a pescar alrededor de las 6 de la tarde de ayer, miércoles, a pesar de las alertas ya emitidas por la proximidad del huracán Erick.
Al llegar a tierra firme, los pescadores mostraban visibles laceraciones en los brazos, evidencia de la ardua noche que vivieron. “Salimos ayer”, comentaron, visiblemente afectados pero aliviados de haber sobrevivido.
Relataron que la única opción que encontraron para resistir la embestida del huracán fue adentrarse en los manglares, donde permanecieron resguardados durante toda la noche, soportando los embates de las ráfagas de viento y lluvia torrenciales.
Este incidente remarca el papel crucial que desempeñan los manglares no solo como barrera natural contra fenómenos meteorológicos extremos, sino también como santuarios que pueden ofrecer protección y, en este caso, salvar vidas humanas.
Expertos y ambientalistas de la entidad han enfatizado reiteradamente la necesidad de proteger y conservar estos ecosistemas, que además de ser vitales para la biodiversidad, son una defensa insustituible para las comunidades costeras de Oaxaca frente al creciente impacto del cambio climático.
