*Dijo estar dispuesta a titulo personal a la reducción salarial que se había planteado antes de su llegada
La nueva consejera del Instituto Nacional Electoral, Rita Bell rechazó que los vínculos previos con el partido oficial Morena de parte de las y los nuevos consejeros, como la propia presidenta, no influyen, ni harán parcial su trabajo.
“Cumplimos con los requisitos que pidió la ley, y uno de ellos es comprobar que hubiera autonomía e imparcialidad”.
Sostuvo que quienes se encargaron de revisar su probidad, “fueron personas académicas, no fueron diputados, hicieron toda la filtración y pasaron la lista al Congreso y se hizo una insaculación, no hubo una intervención directa ni de ninguna otra forma dentro del proceso de las designaciones”.
Rechazó favoritismo o pago de cuotas a grupos de morena, “ha habido trabajo, en mi caso estuve en la sociedad civil, hubo proyectos con diferentes autoridades, no hay compromiso y todas y todos garantizamos imparcialidad”.
Luego de participar en el Encuentro Nacional de Fiscales Electorales y el Impacto de las Reformas, consideró que el INE está fortalecido aunque entró a un momento de polarización.
“Había personas que cuestionaban a algunas cosas, como los recursos, el actuar de algunas personas dentro del Instituto, pero el INE está fortalecido, es parte de un modelo democrático, que ha ido creciendo a lo largo de los años, me parece que es una gran institución, en la que las personas creen”.
Respecto a la propuesta de reducir significativamente los salarios de los consejeros electorales, señaló que “es parte de una reforma constitucional, que yo acataría, solo que me digan cual sería el procedimiento yo lo estoy revisando, a titulo individual no tendría problema con ello”.