-Hace caso a grupo de empresarios para reformar ley y no escucha a magisterio, reclama
México D.F.-El representante de Oaxaca ante el Pacto Federal, senador Montoya exigió a la Presidencia de la República reformar las leyes secundarias en materia educativa, para acabar con el conflicto social y magisterial que se vive en y otras entidades del país, tal y como lo hizo con la Ley Anticorrupción ante la inconformidad de un pequeño grupo de empresarios.
“Es lamentable que el Presidente de la República no entienda y atienda la voz de muchas mujeres y hombres, una gran cantidad de ellos maestros, que han venido reclamando reformar las leyes secundarias en materia educativa, nosotros mismos en este Senado hemos presentado iniciativas para que deje de existir esta evaluación punitiva, hemos presentado iniciativas para que no exista evaluaciones estandarizadas”.
Durante su participación en la discusión de las modificaciones a la Ley General de Responsabilidades, conocida como Ley 3 de 3 o anticorrupción, el senador oaxaqueño aprovechó la máxima tribuna de la Nación para exigir atención al conflicto social de Oaxaca, que este martes cobró la vida de un civil más, llegando a 12 el número de decesos por la represión de la policía federal y estatal el pasado 19 de junio en Nochixtlán y Viguera.
Respecto del tema en discusión en el Senado de la República señaló que las organizaciones de la sociedad civil, entre las que destacadamente se encontraban las de empresarios, hayan reclamado airadamente el tema de la obligación de presentar declaraciones por parte de los particulares, pero no hayan alzado la voz en contra de la legalización de la opacidad y la impunidad que esta ley contiene.
Dijo que el proceso de construcción de la legislación secundaria en materia de combate a la corrupción ha sido inauditamente sinuoso y se nota que muchos intereses se sintieron amenazados y sacaron las garras para defender sus cotos de corrupción e impunidad.
Refirió que la participación de la sociedad civil fue fundamental para la construcción de este proceso, en la lucha por combatir el que sin duda es uno de los más grandes flagelos de que adolece nuestro país: la corrupción.
Y esas mismas voces, esa misma exigencia ciudadana, ahora tienen al Senado en un segundo periodo extraordinario para corregir lo que se hizo mal.
Sin embargo, reprochó, ojalá con ese mismo ahínco se hubiera protestado para que se consideraran servidores públicos a los consejeros independientes de los órganos de gobierno de las empresas productivas del Estado.
Así como porque la publicación de las declaraciones fuera obligatoria y no quedara sujeta a la voluntad del servidor público; o por el pleno e irrestricto acceso de los ciudadanos a la información relativa a las sanciones de que hayan sido objeto los servidores públicos.
Tampoco he visto un espíritu autocrítico, apuntó, de reconocer que no pocos empresarios en este país, han sido fuente de corrupción en colusión con autoridades.
“Aplaudo que hoy las organizaciones, con su reclamo, estén logrando que se enmiende un claro error del Congreso sobre el contenido y redacción de la Ley General de Responsabilidades Administrativas. Pero lamento que dejen pasar la oportunidad de alzar la voz para que se enmienden el resto de debilidades y carencias de este instrumento”, reiteró.
